La Nave del Misterio no cuenta, afirman sus colaboradores

El conocido periodista y divulgador admite que en su vida diaria ve muchos ovnis. Su contacto con información privilegiada y clasificada le da acceso al conocimiento de lo esotérico y lo misterioso que a un español medio normal le está vedado.
Sin embargo, Iker Jiménez ya ha manifestado que puede que su visionado de naves extraterrestres en el cielo y en la Tierra esté llegando a un límite en el que la mente humana no sea capaz de albergar tanta emoción y recogimiento.

«De camino al trabajo veo, de media, seis siete objetos volantes no identificados; a veces me adelantan por la autopista, otras aparcan a mi lado…», reconoce el presentador de Cuarto Milenio, quien cree que es un afortunado pero que el resto de los españoles también tiene derecho a ver platillos volantes al menos una vez en la vida.
Por otro lado, el intercambio de mensajes con seres de otras civilizaciones podría estar alejándolo de su entorno familiar y social más cercano, alertan sus amigos.