
Los sanfermines de este año no dejan de dar buenas noticias. A la escasez de australianos heridos por paraplejia y asta de toro se añaden las magníficas marcas registradas en los encierros. La de esta mañana ha dado el vuelco al marcador.
Según el reloj atómico ubicado en la confluencia de Estafeta con Mercaderes, el encierro de esta mañana ha sido el más veloz jamás recorrido, al establecerse un registro de 2′ 3″ 448 ms, y 6748711 ns.
La hazaña fue lograda por la ganadería Palafrenero, una cabaña famosa por su velocidad y capacidad de agonía en el coso, pero desconocida por las intrincadas calles de la capital pamplonesa. «Veníamos con la maleta cargada de ilusiones, pero no imaginábamos que íbamos a batir el record de velocidad de sanfermines», reconoce un emocionado Jose Luis Palafrenero, propietario de la escudería.
La noticia ha sido acogida con sorpresa y regocijo por los medios locales, quienes desde las ocho de esta mañana no dejan de informar, a veces hasta el hastío, sobre la extraordinaria plusmarca.
En otro orden de cosas, la turista neozelandesa Linda Wilkinson se recupera favorablemente de una contusión sufrida al acercarse el pavimento de Mercaderes a su cabeza mientras paseaba tranquilamente.