Un niño de once años se arrojó por la ventana de un entresuelo después de ver que todos sus amigos lo hacían en la sevillana localidad de Dos Hermanas.
Al parecer, los hechos se produjeron tras una disputa familiar entre el menor y su madre quien le achacara en anteriores ocasiones su poca personalidad en relación a su pandilla: «¿Y si tus amigos se tiran por la ventana tú también?»
Harto de escuchar siempre la cantinela, el niño y sus amigos decidieron hacer el reto del lemming: arrojarse uno tras otro por la ventana para dar una lección a sus padres de que efectivamente, si los amigos se tiran por una ventana, ellos también.
Afortunadamente, la caída al vacío no ha provocado más que leves traumatismos
«Me deja sin argumentos; mi niño me ha puesto en mi sitio«, ha declarado la madre, quien a partir de ahora afirma que respetará más a su hijo por su marcada querencia gregaria.
