
Gastón Rolletti, el conocido locutor deportivo de televisión argentina, ha comenzado a narrar esta tarde los partidos relativos a la fase final del Mundial de Catar.
Provisto de varios bocadillos, mudas para varios días y una cantimplora, el periodista comenzó a relatar el Argentina-Arabia Saudí que oficialmente se disputará el 22 de noviembre próximo «para implementar la cadencia inexorable del dios Kronos en un ámbito que me haga sentir re-bien». Es decir, para ganar tiempo.
Conocido por sus prolijos circunloquios y la riqueza de sus expresiones, el argentino es también célebre por intercalar en sus intervenciones anecdotas familiares, hablar de las bondades de los alfajores e insistir con que en 1929 Argentina era el 2º país con más renta per cápita del mundo.
Todo el mundo recuerda en el país hermano su narración en el Mundial de Mexico en 1986, cuando Maradona marcó dos goles que dieron a su equipo el pase a semifinales: «Dieguito avanza agrandes trancos por el área chica del arquero británico, cuya apolínea figura recuerda a la bellísima historia del geómetra Aristarco de Éfeso y Apolonio de Rodas cuando ambos dirimieron en Delfos si la estética determina el ser o el estar…«.
Por aquel entonces, Rolletti terminó de locutar el encuentro seis días después de la final mundialista según sus propias palabras » quedándoseme una espinita implementada, pero no profunda sino superficial y de manera figurada, obvio».
En el momento en que se publican estas líneas, el periodista lleva dieciséis horas describiendo el estado físico de los jugadores de la selección nacional de fútbol.