
Rusia acaba de anexionarse cuatro provincias ucranianas, y eso ha gustado a la Cataluña independentista. Jersón, Zaporiyia, Donesk y Lugansk han pasado a jurisdicción rusa después de un supuesto referendum a favor de separarse de Ucrania.
Esta iniciativa ha sido vista con envidia por el independentismo catalán que, lejos de entender la geopolítica internacional, sigue siendo partidario de separarse de España. Miles de manifestantes se han concentrado en la fuente de Canaletas para gritar «Ucrania ens roba«
El presidente de la Generalitat de Cataluña, Pere Aragonés, ya ha enviado a varios jinetes para ponerse en contacto «al más alto nivel» con Vladimir Putin y conocer nuevas vías de negociación . Llegado el caso, su gobierno ve con buenos ojos unirse a la Federación Rusa si eso supone un avance en el procès. «Luego vendría lo fácil; o sea, separarse de Rusia.», reconoce Aragonés.