No pudo ser. El líder del PP no logró acabar nominado por la Academia de Cine norteamericana, pese a que todos los pronósticos apuntaban que, este año sí, Pablo Casado se llevaría la preciada estatuilla. Sï ha sido nominado Javier Bardem, némesis ideológica y moral de éste.

«Mira que le dijimos que no sobreactuase en los mítines, que eso iba a penalizarle. Pues nada», explica Mercedes Stanislavsky, coach de actuación del político.
Pese a la decepción, aún podemos disfrutar de su último papelón en «Lost in Remolacha», de Isabel Coixet, donde interpreta a un agricultor de Monzón que lucha por llenar las arterias de sus amigos con azúcar y grasas saturadas. El docu-drama completa el elenco con la siempre solvente Meryl Streep, quien ha sido nominada a mejor actriz no sobreactuada.