Grupos de investigación de todo el mundo asombrados ante la evidencia: las zonas del planeta donde se produce un aumento repentino de la actividad sísmica y volcánica presentan una incidencia casi nula de casos de COVID. Remigio Huidobro, adjunto a la Cátedra de vulcanología de la Universidad de Calasparra (Murcia) y máxima autoridad española en el tema, ha estudiado el hecho en colaboración con epidemiólogos de la universidad de Oxford.

“Al principio los datos nos parecían poco creíbles, pero al estudiarlos sobre el terreno pudimos constatar que cuando te va a caer un piroclasto sobre la cabeza o se te acaba de evaporar la piscina los síntomas de COVID se evaporan simultáneamente” apunta el mencionado especialista. Ahora mismo la investigación está centrada en determinar si los gases emitidos por el volcán canario han podido eliminar el virus al ser inhalados por los afectados.
Curiosamente también se ha percibido una sorprendente mejora en casos de reumas , tendinitis y contracturas: “hemos apreciado una sorprendente mejora entre individuos con cuadros reumatoídes muy avanzados , de hecho les hemos visto correr como alma que lleva el diablo, con mascarilla, eso sí”.
Por otra parte, el Gobierno ha confirmado a esta redacción que Fernando Simón ha realizado ya las últimas sesiones del curso de vulcanología de 60 horas (10 créditos) de duración al que se había matriculado con el propósito de seguir saliendo en pantalla.