
La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, ha ordenado a su gabinete de prensa que dirija un burofax al jefe operativo de E.T.A para que “no pueda decir que no lo ha recibido”.
Esta curiosa iniciativa tiene como objetivo desviar la atención de sus desacuerdos con el Ministerio de Sanidad entre otros y volver a introducir otro elemento tradicional y folclórico en la Comunidad de Madrid. Ayuso está convencida de que “el comando Madrid era parte del Madrid castizo, como los toros, los atascos y los barquilleros”
Baldomero Diez Buitrago, lampista retirado y jefe operativo actual de ETA se muestra sorprendido y molesto por la repentina decisión de la avezada política: “Yo cogí lo de la jefatura porque nadie en la escalera quería ser y me dijeron que no daba trabajo” nos comenta sin salir de su estupor “si tengo que montar un comando no sé ni por dónde empezar”.
La viabilidad de la propuesta dependerá de negociaciones de última hora entre los representantes de Ciudadanos que pretende que los miembros del comando usen armamento de fogueo y serpentinas, mientras que Vox no se conformará con “menos de tres alzamientos por semana”.