
Quién le iba a decir a Chiquito de la Calzada que iba a ser noticia cinco años después de su muerte. Apenas un año después de su parcial implantación, el Gobierno da marcha atrás con la LOMLOE. Las críticas llegadas tanto del profesorado como de varios grupos de padres de What´sApp han hecho cuestionar las supuestas bondades de una ley que no gustaba a nadie salvo a los snobs.
Por eso el Ministerio de Educación ya está elaborando el borrador de una reforma completa a la que denominará LONDEMOR (Ley Orgánica de Educación y Condemor).
«Este parche educativo desea representar valores basados en otro tipo de disparates, pero que al menos hagan gracia, y quien mejor los representa es Chiquito de la Calzada«, argumenta Mauricio Halfman, un inspector educativo que lleva treinta años lejos de las aulas.
La LONDEMOR promulgará, entre otros valores, la cultura del esfuerzo después de los dolores, e incentivará el emprendimiento por la gloria de mi madre.
Muchas de las novedades pasan por reformas estructurales o de plantilla. Así, en los centros se añadirá un nuevo funcionario, el fistro, que se encargará de quitar la capucha a los más díscolos. Por otro lado, los alumnos repetidores pasarán a ser abiertamente «cobarldes» y «más vagos que el sastre de Tarzán«. Antes de regañar se dirá «¿te das cuén?«, en la creencia de que el infractor, «o pecador de la pradera«, reflexionará sobre su conducta disruptiva. De agravarse la situación se recurriría a la Meretérica.
El profesorado estará obligado a entrar en las aulas caminando de puntillas. El alumnado sólo podrá referirse a éste si se le trata de agromenauer.
En cuanto a las materias, los contenidos sufren leves pero consistentes cambios, siempre desde el punto de vista diodenal de Chiquito de la Calzada.
Una de las medidas más controvertidas estaría en Historia del Arte, ya que no se enseñará un pantocrátor ni el románico en general por «ser más feos que el Fary comiendo limones«.
Educación Física: si hay una imposibilidad físicamente y moralmente diodenal, transitoria o permanente, el discente podrá no realizarla con un justificante medico que rece «No puedor».
La educación en igualdad mantendrá la observancia de la diversidad sexual, principalmente hacia el colectivo transdiodenal y el género apitican a more nau.
El equipo directivo pasa a ser supervisado por la figura del Inspectorpedo diodenal, cuyo vehículo oficial será únicamente el caballo de Bonanza. Tras cuatro años de estudios secundarios, el alumnado, o ajandemor, recibirá una etiqueta de Anís del Mono que acredite dicho proceso educativo.
Docentes de todo el país han manifestado por redes sociales que los cambios basados en Chiquito de la Calzada no son más descabellados que la actual LOMLOE.
3 comentarios
Sería mucho más racional
Al menos con esta Ley los alumnos prestarían más atención. Con entrar de puntillas y andar hacia delante y detrás, tienes garantizada la sintonía con el alumno, por la Gloria de mi madre.