
El prestigioso premio “Young Thatcher”, otorgado por la empresa de semillas transgénicas Monsanto, el fondo de inversión “Blackrock” y la fundación FAES, ha recaído este año en la Consejera de Educación del gobierno de Cantabria, Cristina Lombo por su “increíble capacidad de ignorar a los mal llamados agentes sociales, a sus subordinados y hacer lo que le sale del coño en situaciones límite”.
La entrega del galardón, dotado con un paquete de acciones de la mencionada empresa de transgénicos, una cinta de lomo embuchado y una caja sorpresa, tendrá lugar en Quintanilla de Onésimo (Valladolid) y contará con José María Aznar como anfitrión y mantenedor del acto. Se espera la asistencia de conocidos representantes del ultra centrismo mundial, entre ellos el presidente de Hungría, Viktor Orban y el de Filipinas Rodrigo Duterte que acudirán acompañados por señoritas de compañía.
Fuentes fiables asumen que la repentina decisión de la dirigente regionalista de cancelar de forma unilateral una semana no lectiva hizo que subiera muchos enteros en las listas de candidatos, pero no los suficientes como para arrebatar el premio “Big Reagan” dotado con treinta kilos de morcilla de cebolla, un tanque y seiscientos mil euros en oro al Ministro de Educación de Mongolia, Jamiyansuren Batsuuri, cuya decisión de sumergir en aceite hirviendo a todo el claustro de un colegio por poner la calefacción “demasiado alta” le aseguraron el galardón.