
Un comando formado por varias madres y un padre que pretendían reventar la cena de Nochevieja ha sido desarticulado esta mañana, gracias a la intervención del grupo operativo de intervención rápida de la Guardia Civil.
El comando, ubicado en Granadilla de Abona, pretendía ofrecer unos huevos con patatas fritas a sus familiares y allegados, desbaratando así la tradicional complejidad culinaria de estas fechas. Por si fuera poco, culminarían la cena sirviendo de postre gofio, yogur natural o mandarinas a elegir, para causar aún más daño y desconcierto.

Los detenidos, siete mujeres y un hombre, todos mayores de edad y españoles, se encuentran desde hace unas horas en dependencias policiales. Según su abogado, se les ha ofrecido una cuchara de madera y nitrógeno líquido con la esperanza de que depongan su actitud.
El comando «Kitchen» llevaba planeando el golpe desde la pasada nochevieja, cuando decidieron que se iba a a encerrar a cocinar dos días Rita.