
El Ministerio de Educación no disimula su preocupación ante la continua sangría de talentos hacia otros países para desempeñar su labor científica. Talentos que muestran su competencia científica en campos como evasión fiscal o la lucha callejera.
En las últimas fechas hemos conocido el caso de Froilán de Marichalar y Borbón. Famoso por sus investigaciones a pie de calle, a sus veinticuatro años, el astroquímico deja España para irse a vivir a Abu Dhabi, donde ocupará la cátedra de doctor en la prestigiosa Life University.
La ministra del ramo, Pilar Alegría lamenta la marcha de tan destacada figura: «No sabemos cómo retener el talento; bueno, sí, metiendo más pasta, pero en el caso de don Froilán no hay dinero en el mundo que lo meta en vereda».
Afortunadamente Juan Carlos I, cuyo prestigio internacional es conocido por lo mucho que ha hecho por la democracia, será el encargado de dirigir su tesis doctoral, «Enlaces reales entre primos y su relación con desempeños cognitivos: una evidencia científica».

2 comentarios
Espero qué no ocurra lo mismo con la Doctora en Medicina y Ciencias de la Educación, doña Isabel Ayuso. Su perdida en las instituciones españolas sería dramática. Aunque, también decir, que los españoles entenderían que La Señora se fuera a Arabia, por lo menos durante 40 años, para convertir a los infieles.
Este ya tuvo fuga en el cerebro de pequeño.