La lentitud en el proceso de vacunación contra el COVID-19 ha hecho correr el bulo que asegura que mantener relaciones sexuales con una persona vacunada genera los mismos anticuerpos en el individuo aún sin vacunar. El propio ministro de Sanidad, Salvador Illa, ha tenido que desmentir la noticia ante la dimensión que estaba adquiriendo el problema. “No hay evidencia de que los anticuerpos contra el virus puedan transmitirse por vía sexual, así que -hasta que el CSIC no haya llevado a cabo las pruebas suficientes- pedimos responsabilidad y castidad”.

La alarma saltó cuando Jerónimo Trashorras, jubilado de Burgo de Osma, fue ingresado con un cuadro grave de fibrilación auricular (taquicardia) debido a un aumento exponencial de contactos sexuales. “Me pusieron la vacuna en el centro de día y no paré de follar hasta por la noche; se me petó el Tinder” aseguró el soriano, que necesitó respiración asistida. Actualmente se encuentra fuera de peligro.
El CNI está buscando el origen del bulo para localizar a los posibles instigadores, e informa que aumentarán su presencia en centros sanitarios para interrogar a aquellos individuos ya vacunados que presenten fracturas de pene, anemias repentinas o desorientación no alcohólica.