
La Caixa desea terminar el año ampliando su cuota de mercado más allá de las fronteras españolas, y por eso inicia su andadura internacional en el País Vasco.
Para ello ha modificado ligeramente su denominación, pasando de Caixa -o caja en dialecto valenciano- a Caixo, que en vascuence significa hola. Además ha añadido a su logo una simpática mano que saluda, llevando a cabo así su propósito de ser un banco human-friendly.
«El vascón es amante de sus cosas, y no le gusta que lleguen cosas de fuera, por ser ellos de naturaleza hosca y tener un folklore muy variado», ha declarado el presidente del consejo accionistas de la entidad bancaria, Jaume Segura Miró. Por esa razón, la primera oficina de Caixo se ha abierto en un lugar emblemático y de fuerte raigambre euskalduna como es la villa de Laredo. La inauguración, prevista para el próximo martes, ofrecerá a sus clientes un vino español, así como algunas de las tapas más conocidas de la gastronomía vasca, como son las rabas de peludín, anchoas de Santoña y, por supuesto, sidra El Gaitero.