
“Se veía venir” ese es el sentir general de los vecinos de un inmueble del distrito de Sants en Barcelona. El propietario del 6-D, Matías Pisuerga, conocido por su desmedida motivación hacia la iluminación navideña, cercana a lo psicopático, ha provocado un apagón general en el distrito al conectar de golpe la decoración luminosa acompañada de fanfarrias sonoras de forma que varias operaciones quirúrgicas han tenido que ser pospuestas.
Según la subestación eléctrica que suministra a la zona, desde el día 20 de diciembre se vienen observando picos de demanda eléctrica superiores a 10 kV en el domicilio del señor Pisuerga equiparables a los consumos de una tarde de partido en el Camp Nou.
Durante las navidades pasadas se produjo un incendio en el mencionado domicilio que acabó con la vida de la suegra del propietario, que tuvo que saltar desde el balcón, envuelta en llamas. AENA , por su parte ha transmitido a las diferentes aerolíneas que operan en el aeropuerto de El Prat las coordenadas del domicilio barcelonés para evitar confusiones catastróficas en caso de que se produzca un aterrizaje de emergencia.