
El cese temporal de la convivencia entre Juan Carlos I y la reina Sofía ha sufrido una interrupción durante el funeral de Constantino de Grecia.
Y es que el matrimonio sólo se ve cada vez que se muere algún monarca o primo, lo que viene a ser prácticamente lo mismo. La última vez que ambos coincidieron fue en los fastos por el fallecimiento de Isabel de Inglaterra.
De ahí el interés del rey por retomar el contacto con la reina Sofía, al albur de lo captado por los micrófonos: «A ver si nos vemos, Sofi, que sólo coincidimos en entierros«. La reina, según informes, habría rechazado el ofrecimiento porque, dijo, durante años tuvo que ser muy profesional y ahora por fin puede pasar por debajo de las puertas sin golpearse.
Juan Carlos pasa por malos momentos: no sólo ha tenido que alejarse de su exilio en Abu Dhabi sino que hace pocos días su nieto se fue a vivir con él, presuntamente también para huir de la justicia.