
Mucho se ha hablado del origen de la moción de censura que estos días protagoniza la escena política española. Hace pocas semanas, Sánchez Dragó reveló que lo de proponer a Ramón Tamames como cabeza visible se le había ocurrido a él en una comida con amigos suyos de VOX. «Oye, ¿por qué no escogéis a Tamames y así nos echamos unas risas?», declaró éste en diversos programas de televisión.
Sin embargo, viendo la deriva que dicha moción tomó, y los pocos visos de éxito que se esperaba de ella, el veterano autor se ha querido ir desentendiendo de dicho mérito, cediendo el honor de la idea en una amistad hecha en sus muchos viajes al lejano Oriente.
Onakono Hentai es una niña de trece años, licenciada en flología romanche y vieja conocida de Fernando Sánchez Dragó. Habitual de las principales tertulias políticas y literarias, no deja títere con cabeza, tal es su oratoria. En una de esas tertulias, en el Café Tokio, se conocieron e intimaron. Hablaron de literatura, de festivales indie y, por supuesto, de Ramón Tamames.
«Onakono tiene una clarividencia prístina del tuétano hispano, así como a los próceres e hidalgos patrios«, declaró el autor de novelas como «Estupro nipón» y «Tántrico va el cántaro a la fuente». Pese a sus años, Sánchez Dragó sigue siendo un caballero y portento amatorio.