Según ha sabido nuestra redacción, el director del Negociado de Pureza de Sangre de la formación de Ultraderecha, Juan de Dios Regaña ha instado a los cargos electos del partido a que registren en ambas cámaras una proposición no de ley para que sean los españoles de “raza pura” los primeros en recibir la vacuna “siempre que se hayan hecho experimentos suficientes con individuos de otras razas”

“Hay que hacer las cosas como Dios manda” exclama el mandatario, quien añade que “en esto los españoles no nos la podemos jugar”. La pureza de sangre es un concepto caduco y vacío de contenido según la comunidad científica que VOX pretende rescatar, en consonancia con sus posiciones acientíficas y punto menos que delirantes. Para demostrar la pureza de sangre el solicitante deberá acreditar tener por lo menos cuatro bisabuelos con apellidos españoles “entendiendo la palabra abuelo como genérico, es decir abuelos y abuelas” nos comunican desde la formación.
La propuesta ha levantado no poco revuelo entre los militantes de la formación nacidos en otras latitudes. Sin embargo el señor Regaña quiere tranquilizarlos: “para todos nuestros militantes de ultramar será suficiente que presenten un análisis de sangre en el que se revele un número suficientemente bajo de glóbulos rojos”. A fin de conseguir la anhelada inmunidad muchos afiliados han comenzado a solicitar a sus médicos privados que se les practiquen sangrías o bien que se les apliquen sanguijuelas.